Para hacer frente a la estampida neoliberal que estamos viviendo, hacen falta conexiones, sinergias, redes flexibles pero a la vez resistentes.
La retórica de la austeridad liderada por la Troika (Banco Central europeo + Comisión Europea + Fondo Monetario Internacional) y seguida por gobiernos autonómicos y estatales, se traduce en recortes presupuestarios, y como consecuencia, se dejan de garantizar derechos sociales previamente adquiridos. En el ámbito sanitario en Cataluña: desuniversalización de la cobertura sanitaria, menos personas con asistencia sanitaria asegurada por el Estado, reducción de la cartera de servicios, precarización de la atención ofrecida (menos personal, menos tiempo por consulta, hospitalizaciones sin agua ni mantas…), alargamiento de las listas de espera y un largo etcétera. El pasado mes de noviembre tuve la oportunidad de participar en el curso-encuentro “La lucha por la salud en Europa” (The Struggle for Health in Europe) del Movimiento para la Salud de los Pueblos (PHM- People Health Movement) y la Universidad Internacional de la Salud de los Pueblos (IPHU- International People Health University). Tuvo lugar en Tesalónica, Grecia –¿donde mejor?- y reunió más de 50 participantes de más de 20 países diferentes, la mayoría europeos, pero también de Nepal, Pakistán, Palestina, Egipto, Uganda y Brasil. El comité organizador y de formadores lo formaban unas 10 persones miembros y colaboradores de PHM de Grecia, India, Egipto, Australia, Reino Unido, Italia y Holanda, entre otros.
PHM es un movimiento social a escala internacional de activistas en defensa de la salud de los pueblos.
El movimiento es una plataforma para la investigación, el análisis, las campañas, las movilizaciones, la incidencia política y la resistencia. En el marco de la campaña principal “Salud para todo el mundo” (Health for all), se engloban proyectos de resistencia tan variados como por ejemplo acciones y proyectos de base locales como clínicas solidarias en Grecia –que tuvimos la ocasión de visitar- o la actual campaña de incidencia política contra la Asociación Transatlántica de Comercio e Inversión ( ATCI o TIPPS- Transatlantic Trade and Investment Partnership), la universidad IPHU que ofrece cursos gratuitos en todo el mundo, o bien la redacción del informe alternativo de salud “Global Health Watch” (GHW) dotado de evidencias y experiencias locales de todo el mundo, y también la iniciativa de gobernanza global en salud, que incluye observación y apoyo crítico en la Organización Mundial de la Salud (OMS). La experiencia de la formación fue muy enriquecedora, una buena combinación de transferencia de conocimiento de todas con todas, conocer acciones locales, encontrar activistas en salud de todas partes y compartir experiencias, así como reflexionar conjuntamente sobre la problemática del desmantelamiento de los sistemas públicos de salud: causas, procesos, similitudes globales, particularidades locales y posibles acciones a emprender. El clima durante los 8 días fue de completa horizontalidad, apertura, respeto y participación. Nos pusimos al día, explicándonos y conociendo el estado de los sistemas sanitarios de los diferentes países y los efectos que la llamada crisis está teniendo. Grecia al frente del desmantelamiento, seguida de Italia y el Estado español. Pienso que el principal aprendizaje del encuentro fue el hecho de trabajar la dimensión global y generalizada del proceso.
Estamos viviendo la tercera crisis del capitalismo. Hay sobreproducción y a pesar de la expansión de la cultura y el sistema consumista, falta mercado donde colocar producto. Los sectores de la educación y la sanidad, estándares públicos del supuesto estado del bienestar, se están reconvirtiendo: desmantelan el presupuesto público, los precarizan y después se dice que son ineficientes y estructuralmente deficitarios (¡falso!); de este modo se argumenta la progresiva privatización y se convierten en los nuevos mercados donde colocar productos, servicios, tecnología, seguros, etc.
Lo que ocurre en Cataluña y el Estado espanyol no es fenómeno aislado, es un avance neoliberal globalizado y como tal es necesario encontrar alianzas globales en los sectores sociales resistentes que luchan por denunciar, actuar y hacerle frente.
Abusos globales necesitan reacciones globales, conexiones locales-globales que fortalezcan los movimientos sociales para que las luchas locales salgan reforzadas. Conectar arenas sociales que están protagonizando las mismas luchas en todo el globo y crear sinergias: comunicativas, informativas; co-crear y emprender acciones a escala internacional. Animo a toda persona y colectivo interesado a acercarse al PHM, podéis leer la Carta de la Salud de los pueblos (People’s Charter of Health), uniros al facebook de PHM-Europe para compartir las luchas locales y estar al día del que pasa en el resto de Europa.
Ni aquí ni en ninguna parte, ¡no queremos amigos de la Troika! ¡Con la salud y la educación, no se juega!
Laia Pibernat Mir Tarragona NOTA: fotografía de la galería Flickr de The All-Nite Images