Cuarta entrega de la campaña #PorelDerechoalaSalud que estrenábamos el pasado mes de febrero con el video manifiesto en defensa del derecho a la salud frente a las amenazas de privatizar y mercantilizar la salud en todo el mundo.
Y hoy viajamos hasta el desierto del Sahara, a los campamentos de refugiados saharauis situados cerca de la población argelina de Tindouf, en plena hammada, la parte más inhóspita del desierto. María Elena del Cacho, farmacéutica, responsable de nuestro proyecto de producción de medicamentos en el laboratorio que montamos hace ya casi 20 años en los campamentos, nos explica cuál es su situación sanitaria y más en concreto, el acceso a los medicamentos.
Organización sanitaria de los campamentos y principales problemas de acceso a los servicios de salud y a los medicamentos
Sin lugar a dudas el principal problema de acceso a la salud y a los medicamentos es el contexto en el que se encuentran. Ser un pueblo refugiado marca diferencias en casi todos los niveles de su vida diaria. La dependencia exterior de los grandes donantes y de subvenciones fluctuantes dificulta que se cubran las necesidades básicas de la población.
El Ministerio de Salud Pública de la RASD (República Árabe Saharaui Democrática) tiene diseñado un mapa sanitario que cuenta con dispensarios en los diferentes barrios de cada wilaya (poblados) y un hospital regional por wilaya. Además, en Rabouni, enclave administrativo en los campamentos, y en Bol·la, hay dos hospitales con quirófanos y preparados para atender los casos más graves o, en última instancia, evacuar hacia Tindouf, Argel u otras localidades. En todos estos centros, sean dispensarios pequeños u hospitales, encontramos un botiquín o una farmacia.
La distribución de los medicamentos
La Farmacia Central es el centro de recepción y de distribución de todos los medicamentos y materiales que entran en los campamentos. Se dispone de una Lista Nacional de Medicamentos Esenciales, basada en la lista de la OMS, para asegurar que la población tenga acceso a los tratamientos que se les prescriben.
Los medicamentos entran en los campamentos dos o tres veces al año, las cantidades disponibles dependen de las donaciones.Teóricamente el acceso a la medicación y a los fármacos no debería de ser un problema, sin embargo no suele ser así. El sistema de gestión todavía tiene muchas lagunas que hay que ir depurando, la recogida de datos representa un reto en los campamentos.
El personal sanitario
La buena prescripción es un uno de los factores que más influyen en el acceso y en el uso racional de los medicamentos. La falta de una atención médica suficiente, sobre todo especializada, supone un problema sanitario en los campamentos.
Para hacernos una idea, en 2013, mientras en España se disponía de 39,6 médicos por cada 10.000 habitantes, o en La Unión Europea había una media de 33,3 por cada 10.000, en los campamentos solo tenían 2 médicos por cada 10.000 habitantes.
Para intentar paliar las deficiencias de personal médico (sólo hay un ginecólogo en todos los campamentos o sólo 2 pediatras) diferentes profesionales sanitarios, como enfermeros, matronas u otros agentes de salud, son los responsables de la atención a los pacientes en dispensarios y hospitales regionales y se les va reciclando en su formación.
Datos de 2013 del departamento de estadística del Ministerio de Salud Pública de la RASD sobre la disponibilidad de personal sanitario en los campamentos y los territorios liberados del Sahara Occidental:
Médicos Generales | 22 |
Médicos Especialistas | 2 Pediatras
1 Ginecólogo, urólogo, internista, gastroenterólogo. |
Estomatólogos | 12 ( 1 especialista es prótesis) |
Especialista en Laboratorio clínico | 1 |
Brigada Cubana | 5 médicos especialidades diferentes |
Médicos por 10.000 Habitantes | 2 |
Enfermeros y matronas por 10.000 Habitantes | 6 |
Odontólogos por 10.000 habitantes | 1 |
*Farmacéuticos por 10.000 habitantes | 2,6 |
Camas hospital por 10.000 Habitantes | 30 |
% Partos atendidos por personal formado | 64 |
Nota: cuando se refieren a farmacéuticos, se refieren a personal sanitario adscrito a las farmacias o botiquines, no son licenciados en farmacia. En la actualidad sólo hay 2 licenciados en todos los campamentos, que trabajan dentro del ministerio de Salud.
La próxima semana María Elena nos seguirá contando acerca de la evolución de las enfermedades en los campamentos, como las enfermedades crónicas suponen en verdadero reto para el sistema de salud, y cómo funciona el laboratorio de producción de medicamentos esenciales dentro del sistema de salud de la RASD.