En 2011 medicusmundi aprobó la Declaración sobre Derechos en Salud Sexual y Reproductiva donde fija su posición y manifiesta su compromiso en defensa del derecho de las mujeres a decidir. De la misma forma que no se puede obligar a abortar a una mujer, tampoco se la puede obligar a ser madre.
Ante la presentación del “Anteproyecto de ley orgánica para la protección de la vida del concebido y de los derechos de la mujer embarazada”, desde medicusmundi reiteremos nuevamente nuestra posición a favor del derecho de la mujer a decidir libremente sobre su sexualidad y su procreación.
El aborto en España no es, a día de hoy, un problema sanitario ni crea alarma, ya que según las encuestas la mayoría de la población declara sentirse cómoda con la actual ley de plazos del año 2010, ley que aplicada junto a medidas de educación sexual ha reducido en un 5% el número de abortos practicados.
Una política más restrictiva ha demostrado en muchos países que no sólo no reduce la práctica del aborto sino que la convierte en un problema para la salud, al realizarse en la clandestinidad sin control sanitario, sobre todo entre las mujeres con menos ingresos.
En medicusmundi defendemos el derecho de la mujer a decidir y respetamos sus motivos para interrumpir, o no, un embarazo no deseado, y reclamamos al Estado su obligación de garantizarlo con los medios y servicios públicos necesarios.
Mientras en países como Francia estudian la posibilidad de convertir el aborto en un derecho de las mujeres no sujeto a supuestos, o en Mozambique se plantean legalizarlo para proteger la vida de las madres y su salud, aquí retrocedemos décadas con una propuesta de ley de las más restrictivas de Europa.
Por todo ello, solicitamos que se retire este anteproyecto de ley y se mantenga la actual regulación incluida en la Ley de salud sexual y reproductiva de e interrupción voluntaria de embarazo de 2010, por considerar que es la más común entre los países de nuestro entorno y la mejor forma de respetar y defender los derechos de todas las mujeres.
La posición de medicusmundi se sustenta en los tratados sobre Derechos Humanos, así como en los acuerdos, compromisos y normativa de carácter internacional, como puede verse en la Declaración completa en PDF.