Ya tenemos nuevo Informe Mundial de la Salud 2013. Lo ha publicado la OMS hace unos días y viene a decir que la cobertura sanitaria universal sólo puede alcanzarse con los datos científicos que proporciona la investigación. Con este informe la OMS intenta llamar la atención de financiadores, investigadores y de aquellos que utilizan los resultados de dichas investigaciones para identificar o ejecutar intervenciones en salud.
Pero, aunque el informe dice que “la investigación sobre servicios y sistemas de salud recibe un apoyo relativamente escaso y suele tener poca amplitud”, Werner Soors se plantea si el informe puede tener poca amplitud en sí mismo. Y esto porque, según él, el informe no responde a tres preguntas clave: ¿qué tipo de evidencia científica es la más necesaria?, ¿cómo llevar al primer plano una perspectiva sistémica (que se centre en el sistema de salud como un todo)? y ¿cómo hacemos que esta investigación se traduzca verdaderamente en una mejor salud para todos?
A pesar de que la OMS en los últimos años, con varios informes y publicaciones, parecía haber redoblado los esfuerzos en torno al fortalecimiento de sistemas de salud como estrategia para conseguir la cobertura sanitaria universal, ahora nos sorprende con un informe corto de miras. Y es que, de los doce casos de estudio que propone, seis son sobre la prevención o el control de enfermedades concretas, y otros seis sí tienen más que ver con sistemas de salud pero carecen, segun el autor, de una perspectiva sistémica, que tenga en cuenta las interacciones entre actores e intervenciones.
A esto debemos sumar que apenas se presta atención a los determinantes sociales de salud, y aún menos a la equidad, o que el informe tampoco destaca la investigación en torno al enfoque de salud en todas las políticas, dejándolo algo al margen, como un aspecto meramente complementario.
Existe un peligro claro. Un enfoque centrado más en enfermedades concretas que en las personas y con una visión estrecha puede llevarnos a una cobertura sanitaria más selectiva que universal, en un triste paralelismo con aquella Atención Primaria de la Salud, que por haberse convertido en selectiva hoy es fallida, según muchos. Como sugiere Soors, hay que investigar con más profundidad, y con una perspectiva más abierta, para llegar más lejos.