Con este documental pretendemos llegar a un público nuevo, diverso, joven, que podrá descubrir, entre otras cosas, la historia de amor entre las dos ciudades. Esta vez no queremos hablar de guerras, ni de naciones, ni de pactos. Es de amor de lo que queremos hablar, de la fuerza de la música y su lenguaje universal, de cómo ésta puede romper muchas más barreras que todas las políticas firmadas en grises despachos. Conectaremos con el espíritu de Sarajevo a través de la historia de dos artistas: Bozo Vrećo (Sarajevo) y Clara Peya (Barcelona).